La semana pasada, fuerzas del orden, equipos de primera intervención, ingenieros y otros defensores de la seguridad vial se reunieron aquí en Roanoke para debatir sobre la seguridad vial en Virginia. Fue fácil llenar tres días de debates sobre nuevos retos y éxitos compartidos, pero algunas de las mayores amenazas para la seguridad vial siguen siendo las ya conocidas: entre ellas, la conducción bajo los efectos del alcohol.
El número de víctimas de la conducción bajo los efectos del alcohol sigue siendo angustiosamente estático, tanto a escala nacional como en la Commonwealth. De hecho, los datos del Departamento de Vehículos Motorizados de Virginia (DMV) muestran que, si bien las muertes en general en la Commonwealth disminuyeron en 2018, las muertes relacionadas con el alcohol aumentaron; Virginia informó 278 muertes por conducción bajo los efectos del alcohol en 2018, en comparación con 248 muertes en 2017. La conducción bajo los efectos del alcohol fue responsable de más del 30% del total de víctimas mortales de tráfico en Virginia el año pasado, así como de más de 4.475 heridos. Nos negamos a que estadísticas trágicas como estas se conviertan en la norma.
Por eso, el Programa del Sistema de Detección de Alcohol en el Conductor para la Seguridad (DADSS) -y los principales fabricantes de automóviles a los que represento a través de la Coalición Automovilística para la Seguridad en el Tráfico (ACTS)- se enorgullecen de colaborar con el DMV de Virginia en la iniciativa Driven to Protect. Driven to Protect trabaja en el desarrollo de una solución tecnológica pionera para acabar con la conducción bajo los efectos del alcohol: sensores de alcohol pasivos capaces de medir de forma discreta y precisa la tasa de alcoholemia de un conductor. Si el sensor detecta una concentración de alcohol en sangre (BAC) de 0,08 o superior -el límite legal en la Commonwealth-, el vehículo arrancará pero no se moverá. Se trata de una idea revolucionaria que proporcionará un nuevo y valioso recurso de seguridad, tanto si usted es un padre que cuida de su joven conductor como si es el director de una flota de vehículos de empresa que desea reducir la responsabilidad civil y mantener la seguridad de sus trabajadores.
En mi calidad de presidente y director general de ACTS, he dirigido la tecnología de detección de alcohol, que ha pasado de ser un esbozo inicial en el reverso de una servilleta a convertirse en un prototipo funcional. Fue un gran placer ver rodar este prototipo por primera vez en las carreteras de Virginia. Virginia era el lugar idóneo para apoyar las primeras pruebas a bordo de vehículos de la tecnología DADSS, dado su firme compromiso con la seguridad vial y su apoyo igualmente firme a las tecnologías emergentes. Encontramos un gran socio en James River Transportation (JRT), una empresa de transporte familiar que lleva casi 100 años al servicio de los virginianos. A partir de agosto de 2018, los conductores de JRT y los vehículos de la flota han ayudado a los ingenieros de DADSS a estar un paso más cerca de hacer que esta tecnología esté lista para la carretera al proporcionar 43,342 millas, 4,217 horas operativas y 22,770 muestras de aliento de datos. Una vez que la tecnología cumpla rigurosas normas de rendimiento, los fabricantes de automóviles la integrarán en los vehículos y la ofrecerán a los consumidores como elemento de seguridad opcional, similar a otros sistemas de asistencia al conductor como el frenado automático o la advertencia de abandono de carril.
Virginia está a la cabeza de la nación con Driven to Protect y el esfuerzo por ayudar a resolver por fin el intratable problema de la conducción bajo los efectos del alcohol. Nos entusiasma el futuro en el que esta tecnología esté disponible comercialmente y se integre a la perfección en los vehículos. Juntos podemos salvar vidas e inventar un mundo sin conductores ebrios.
Strassburger es Presidente y Director General de la Coalición Automovilística para la Seguridad del Tráfico. Strassburger es también Vicepresidente de Seguridad y Armonización de Vehículos de la Alianza de Fabricantes de Automóviles, una asociación comercial nacional de doce fabricantes de automóviles y camiones ligeros.